Oregano

Toda la planta es rica en un aceite esencial que contiene timol y carvacrol, de acción sedante, antiespasmódica y carminativa. Contiene flavonoides y ácido ursólico, a los que se atribuyen sus propiedades antirreumáticas. Su uso está indicado en los siguientes casos: Trastornos digestivos: dispepsia (mala digestión) de origen nervioso, flatulencia, espasmos o cólicos de los órganos digestivos. Por su acción carminativa (combate gases intestinales), es un buen condimento para legumbres, potajes y pizzas. Afecciones respiratorias que cursan con tos seca o irritativa, como la laringitis (irritación de la garganta) o la tos ferina. El orégano tiene también acción expectorante, béquica y antitusígena, tanto en uso interno como externo. Dolores musculares, tortícolis y lumbago, aplicando externamente tanto en cataplasma, como en fricciones sobre la piel. Uso: Como condimento se espolvorean sus hojas secas sobre diversas preparaciones culinarias. En infusión: con unos 15 o 20 gramos por li...