La cala, que también lleva el nombre de lirio de agua o flor de jarro, es un hermosa planta que decora los parques y jardines. Si bien, muchas personas las asocian con los cementerios, esto no significa que solo sean flores de panteón sino que es una hermosa planta para decorar cualquier espacio verde hermosamente.
A continuación, te contaremos cómo debes cuidar las calas y cómo debes hacer para cultivarlas.
Las calas, flor de jarro o lirios de agua (Zantedeschia aethiopica) son plantas herbáceas que presentan un tallo subterráneo que también es carnoso. Son plantas que se pueden ubicar tanto en el exterior como en el interior. Florecen en la primavera y pueden estar a sombra o semi sombra.
Aceptan una temperatura de entre 14º y 20º centígrados y florecen todos los años durante la primavera. Las flores presentan forma de embudo y son de color blanco de aroma muy agradable. Sus hojas son de color verde y tienen forma de flecha. Su textura es carnosa y gruesa.
Cuidados de la cala
La cala se desarrolla mejor en un lugar semi sombreado aunque también tolera el sol en lugares donde no esté demasiado fuerte. No resiste las heladas pero soporta algunos grados por debajo de 0.Sin embargo, es mejor llevarla al interior de la casa en esas circunstancias.
En lo que respecta al riego, es conveniente que la tierra donde se encuentre la cala está siempre húmeda, sobre todo durante la temporada de más calor. Durante el otoño y el invierno, esto no es tan necesario y se pueden espaciar los riegos.
Cultivo de la cala
Esta planta se puede reproducir por medio de semillas o al plantar sus bulbos. La tierra tiene que se húmeda y muy rica en nutrientes por lo que es preferible que sea negra.Atención: la planta contiene compuestos que la transforman en un ejemplar muy tóxico. Es importante que no sea ingerida bajo ninguna circunstancia. Además, cabe destacar que la savia con la que cuenta es muy irritante, por lo tanto se aconseja que sea manipulada solo con guantes.
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